El apóstol Pedro habla, en el versículo de hoy, de la importancia de usar la lengua para construir, y no para destruir. Se menciona de manera específica la palabra “engaño”, como uno de los peores instrumentos del lenguaje. Engaño, en el original griego, es dolos. Significa decir cosas bonitas con la intención de alcanzar propósitos malos.
Es el joven que se acerca a una chica para decirle que la ama cuando, en realidad, solo desea pasar un buen momento con ella; es decir que estás enfermo para no trabajar, o hacer creer a los otros que pasas por un momento difícil, con el fin de lograr la conmiseración de las personas y alcanzar objetivos cuestionables.
Pide hoy a Jesús que te ayude a utilizar bien el don de la palabra, “porque: el que quiere amar la vida y ver días buenos, refrene su lengua de mal, y sus labios no hablen engaño”.
Jesus esta contigo!!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario